jueves, 9 de febrero de 2012

Reseña: Cuentos completos - Miguel de Unamuno.

Título: Cuentos completos.
Autor: Miguel de Unamuno.
Editorial: Páginas de Espuma, 2011.
ISBN: 9788483930656.

Los Cuentos completos de Miguel de Unamuno recogen absolutamente todo el pensamiento, toda la creatividad y todas las características de uno de los autores fundamentales de nuestra literatura.
Los casi noventa relatos nos dejan clara su filosofía y la magnífica capacidad creativa que presentan todos ellos.

Como autor de fin de siglo -Miguel de Unamuno fue el principal autor narrativo de la Generación del 98-, Unamuno nos presenta una sociedad pesimista, gris, que no ve futuro estable de ninguna manera. Los escritores de la Generación del 98 son una serie de escritores que tienen conciencia crítica y reflexionan sobre la decadencia del imperio españo debido a las pérdidas de las colonias. Se desencadena la guerra hispanoamericana, lo que da lugar a una catarsis nacional y los escritores -como Unamuno, Antonio Machado y Ramón María del Valle-Inclán- buscan los orígenes, que dan como resultado el apartamiento del pueblo llano.

Unamuno, en su obra literaria lo explica todo a través de paradojas, como una metodología de pensamiento. Creía que los males de España estaban en el individualismo y en el aislacionismo. Al principio pensaba que la solución estaba en Europa, pero luego se desengañó, ya que en Europa todo estaba basado en la razón, y él defendía el corazón, los ideales quijotescos.

Casi todos los relatos nos muestran a personajes normales -con esto me refiero a 'llanos'-, que podríamos ser cualquier de nosotros -como dije antes, esto está relacionado con la decadencia del imperio español-. Las principales características principales de la obra unamuniana  -y que, por tanto, vemos en cada uno de los relatos- son el deseo de inmortalidad, la conciencia que el ser humano tiene sobre ésta; la creación de Dios por parte del hombre y, por último, el enfoque existencialista del que dotó tanto a sus personajes como a los escenarios o a las propias historias. Todo esto lo vemos reflejado, de una manera u otra en cada uno de los relatos.

En algunos relatos, su pensamiento existencialista refleja su angustia ante la imposibilidad de indistinción entre lo real y lo ideal, así como la lucha entre corazón y razón. Unamuno rechaza cualquier pensamiento abstracto; se niega a admitir el poder o control total de la razón. Es decir, la realidad no es el mundo externo, sino nuestra propia existencia. Por tanto, nuestro mundo es lo que nos rodea y en el que nosotros mismos intervenimos, nuestra existencia.

Por otro lado, en los relatos también toca otros temas. Su pensamiento filosófico se basa también, al igual que el de Martin Heidegger o Jean-Paul Sartre, en la lucha contra la muerte, a pesar de conocer su desenlace final. Enfocan sus obras hacia el agobiante porvenir, aunque conocen que es una lucha contra el límite. Y esta preocupación llega a un extremo que termina por convertirse en obsesión, un argumento único. Por todo esto, vemos cómo la filosofía unamuniana trata de su tema principal alrededor del cual gira: la vida.

Además, la estupenda introducción de Óscar Carrascoso Tinoco, que enlaza los relatos con la demás obra de Unamuno, como sus nivolas, donde se difuminan los bordes establecidos de lo que se entiende por novela, o las obras más conocidas, como La tía Tula, San Manuel Bueno, mártir, Niebla, etc.

Cada relato es una auténtica joya, de verdad. Creo que este libro es imprescindible. Además, los cuentos pueden ir acompañando o complementando otras obras,  o puede leerse un relato cada cierto tiempo, alternándolo con otras lecturas. Y si encima, os gusta tanto Miguel de Unamuno como a mí, que me encanta, creo que disfrutaréis muchísimo con este tomo, que reúne -¡por fin!- todos los cuentos del gran novelista del 98.

8 comentarios:

Xavier Beltrán dijo...

Y yo aún no he leído nada de Unamuno, ¡no puede ser! Espero ponerle remedio este año.

Un saludito.

El chico que leía demasiado dijo...

Sure! (Jajajaja). Si quieres, leemos algo junto ;)

Muchas gracias por el comentario, ¡y a poner remedio a eso, eh! ¬¬

(Y aún sigo esperando a Camus....)

Anónimo dijo...

Recuerdo encantada La tía Tula. Y entre ese recuerdo y la lectura de tu critica, voy a animarme con tu recomendación. Gracias! Ya te contaré por aquí.N.M.

El chico que leía demasiado dijo...

¡Hola N. M.!

Pues sí, seguro que te gusta el libro, es muy completito :)

Muchas gracias por pasarte, estaré pendiente para ver tus impresiones.

Un abrazo.

Antonio José dijo...

No me atrevería a afirmar que el gran novelista del 98 es Unamuno, estando Baroja. Cierto que se pensó tal. Después Baroja ha sido más leído que Unamuno y hoy hay quien no sabe ni quién es José Martínez Ruiz. Agradable tu entrada...
Saludos.

El chico que leía demasiado dijo...

Hola Antonio José,

Sí, ambos son muy buenos. Uno más leído que el otro, pero ambos a la misma altura (personalmente). Tal vez el enfoque de las novelas de Unamuno son, en cierto modo, más sociales (aunque tampoco es mucha la diferencia) y por eso se consideraron más importantes. A mí me gustan muuuucho los dos.

Y no, lamentablemente el otro autor no es tan conocido, no...

¡Muchas gracias por tu comentario! :D

kitefuntarifa dijo...

Unamuno es imprescindible, yo me he leído "San Manuel Bueno Mártir" y "Niebla" y ahora empezaré con éste. La verdad es que es un gusto tener autores como él en nuestra lengua materna.

El chico que leía demasiado dijo...

¡Hola kitefuntarifa!

Yo tengo muchas ganas de leer "Niebla", creo que me gustará mucho.
Y sí, la verdad es que es un honor tener a Unamuno en nuestra literatura :)

Un saludo.